A raíz que una prima a comienzo de este año, murió de cáncer, he tenido un impacto muy fuerte en mi vida y sobre todo con mi salud. Estaba buscando algo que me ayudará, sobre todo a sentir las dos posiciones que pueden darse, frente a una enfermedad como el cáncer.
Un amiga que le conté, me recomendó la lectura de este libro: “Morir para ser Yo» de Anita Moorjani, y fue providencial, encontré en él, la respuesta a esta inquietud y me ha dado mucha paz y comprensión en situaciones críticas como está. Además, que ha despertado en mí, el interés por el Ayurveda, que hasta el momento es lo único con un porcentaje alto para hacer frente al cáncer y muchas otras enfermedades crónicas de manera natural.
Estoy aprendiendo cosas, que siento deberían ser enseñadas en los colegios, a nuestros hijos, a los seres más queridos que nos rodean.
Me he animado a escribir esta nota, y complementarla con la traducción de esta carta que Anita Moorjani nos escribió a los suscriptores de su página web: http://www.anitamoorjani.com/
Estimado Ricardo,
A menudo recibo cartas hermosas que tocan mi corazón y esta semana vi una carta de uno de mis lectores que realmente me conmovió profundamente. Es tan poderosa que me sentí obligada a compartirla con el permiso del autor. Está escrita en la forma de una carta de un paciente que busca a su médico; parte de un proceso de «entrevista» en la que el paciente está tratando de determinar si el médico está capacitado para trabajar con ella. Sentí que era importante compartir esta carta, por la forma en que retrata tan claramente cómo a menudo un paciente se siente, cuando se trata de un diagnóstico grave. La autora es Dara Weller quien se describe como esposa, madre de dos hijos, cineasta y documentalista, y alguien que ha dedicado veinticinco años de su vida a amar y enseñar a los niños nativos americanos en las Montañas Rocosas.
Mi prospecto querido doctor:
Para entender mi caso, yo creo que es importante que usted entienda lo que me importa a mí como su potencial paciente. Con esto en mente, he elaborado esta carta para que pueda evaluar su capacidad de trabajar conmigo.
En primer lugar, cuando entro a su consultorio, no hay necesidad para que usted escriba «METASTÁSICO» y «FASE IV» en letras mayúsculas en su tablero blanco o bloc de papel. Por otra parte, no es necesario que usted diga «ME-TAS-TA-SI -CO» en voz alta y clara, pronunciando cada sílaba. Honestamente, oírle decir esas cosas no la hace más real, o sea menos atemorizante. Y como dijo Soren Kierkegaard una vez: «Cuando me etiquetas, me niegas.» Como tú sientes que sabes tanto de estas etapas, yo prefiero la etapa V de la Vida – es por eso que estoy llamando a tu puerta.
A continuación, por favor, nunca me diga «No hay cura para esto.» Me parece falso porque cuando me diagnosticaron en estadio II también me dijeron que nunca utilizará la palabra sanadora – Sólo SEE («Sin Evidencia de Enfermedad»). Olvidemos eso.
Además, diciéndome que esto vuelve – en todas partes de mi cuerpo- y lo único que podemos hacer es la atención paliativa, esto no es útil para mí, y tengo que pedirle que se responda las siguientes dos preguntas:
1.) ¿No había nada del efecto placebo en sus textos médicos? y,
2.) ¿Qué parte de no hacer daño se le olvido?
Busco a un médico brillante, creativo que crea en la sabiduría innata del cuerpo y el deseo de ser saludable. Busco a un médico que sea amable y compasivo, y crea en el tratamiento integral de la persona. Busco a un médico lleno de optimismo que ve potencial y opciones en mi tratamiento. Si usted es este tipo de sanador, entonces creo que podemos tener una sociedad exitosa y gratificante. Y, es una asociación. Os confío mi cuerpo y mi mente. A cambio, voy a trabajar muy duro para ser un paciente saludablemente comprometido. Todos los demás no es necesario aplicar. Gracias por su trabajo duro y su comprensión.
Respetuosamente,
Dara Weller
Es una carta de gran alcance! Realmente me golpeó porque era tan cruda y real. El médico anterior de Dara realmente hizo hacer y decir todas las cosas que se describen en su carta. Me identifico totalmente con lo que estaba sintiendo Dara, y estoy segura que muchos de ustedes también pueden estarlo. Quiero decir aquí que nunca mi intención es ofender a los médicos (y estoy seguro de que no es de Dara tampoco). Por el contrario, sé que tienen buenas intenciones, y si son insensibles hacia cualquiera que vaya a través de un problema de salud, es más por ignorancia, muy probablemente porque nunca han experimentado un Diagnóstico tan debilitante en sí mismos. Mensajes como el de Dara ayudan a recorrer el camino para hacer que los médicos sean más conscientes de lo mucho que sus palabras pueden afectar al paciente, y también afectar negativamente su potencial para sanar. Es mi esperanza que este tipo de conciencia va a cambiar la forma en que la medicina se enseña y se practica actualmente. De hecho, en esta breve carta, Dara ha ofrecido de manera sucinta una lección valiosa para los médicos de lo que muchos de nosotros estamos buscando en nuestros profesionales de la medicina! Muchas gracias, Dara, por permitirme compartir tus palabras en mi boletín de noticias. Sé que va a tocar muchos corazones, y ayudar a muchas personas.
Hasta la próxima, te envío mucho amor y abrazos!
Anita
Ricardo Martinez Rivadeneira 